Para el diseño de la nueva camiseta del CF Lorca Deportiva tuve que comenzar por hacer un boceto exactamente igual que los que se suelen dibujar para llevar a los bastidores de bordado de nuestras cofradías. Es una composición tradicional de filigrana lorquina que se borda sobre terciopelo o raso y con materiales tan nobles como el oro y la seda. Y partiendo de esa idea original como base, poco a poco se va modificando el dibujo para hacerlo más atractivo y que obtengamos como resultado un diseño más contemporáneo que se amolde a lo que es una equipación deportiva actual.
El dibujo original se realiza a lápiz y a mano sobre un patrón de la camiseta de la temporada anterior y ajustándose a los espacios que quedan libres sin publicidad de los patrocinadores, de ahí que se decida colocar el dibujo que simula el bordado en la parte inferior de la prenda.
Además, para reflejar el sentimiento de cada una de las cofradías que procesionan en Lorca, en las bandas perpendiculares del dorso, se intercalan seis nazarenos con los escudos de los pasos que representan, pero se hace de tal modo que desde la distancia no interfieren en el dibujo original de la camiseta, y solo cuando uno se acerca a unos metros, es cuando puede apreciar este ingenioso detalle que caracteriza a nuestra Semana Santa de Lorca.
Por otro lado, para la segunda equipación se optó por eliminar las rayas pero manteniendo siempre el diseño de bordados y nazarenos de la principal. No obstante, se buscó un color que fuese representativo de nuestra ciudad y se eligió para ello el color “carmesí”, que es el que luce la bandera del Excmo. Ayuntamiento de Lorca.
Espero que la idea haya sido del gusto de los aficionados al futbol, de las cofradías y, por supuesto, de todos los lorquinos. La intención es que se sientan identificados con un equipo que quiere representar, allá donde quiera que vaya, a la hermosa ciudad de Lorca.
Desde aquí quisiera dar las gracias a la directiva del Club por pensar en mí. Ha sido un placer poder colaborar de esta forma tan creativa con un grupo humano realmente extraordinario.
Un abrazo muy fuerte a todos, Fran J. Marber.